Pura Luka Vega: la drag queen filipina enfrenta una reacción violenta por el acto de Jesús
Grupos cristianos en Filipinas han presentado denuncias penales contra una drag queen que se vistió como Jesucristo y realizó una interpretación rockera del Padrenuestro.
Las denuncias presentadas ante la fiscalía acusan a la artista, Pura Luka Vega, de 33 años, de "profanar su fe religiosa y su patrón".
Un vídeo de un Luka barbudo interpretando el verso en filipino se volvió viral el mes pasado y provocó un gran revuelo.
Luka defendió su actuación como arte.
Han actuado como Jesús antes, pero su última actuación llamó la atención después de que Luka compartiera un vídeo en X, anteriormente conocido como Twitter.
Esto enfureció al país profundamente religioso, donde algunos líderes eclesiásticos y legisladores han calificado la actuación de "blasfema".
A finales de julio, el Movimiento Filipinas por Jesús, integrado por líderes de la iglesia protestante, presentó la primera denuncia penal ante la Fiscalía de Manila.
Acusaron a Luka de violar el artículo 201 del código penal del país, que penaliza las publicaciones y exhibiciones obscenas y los espectáculos indecentes.
Una segunda denuncia fue presentada esta semana por un grupo católico Hermandad Nazarena. Los fiscales aún tienen que decir si iniciarán un caso.
Filipinas, una antigua colonia española, es predominantemente católica romana: casi el 80% del país se identifica como tal, según la encuesta más reciente de febrero.
Días después de que el vídeo se volviera viral, muchas ciudades, incluida la capital, Manila, convirtieron a Luka en "persona non grata", un movimiento simbólico que los declaraba ya no bienvenidos en la ciudad.
Si bien en realidad esto no impide que Luka ingrese a estas ciudades, les ha costado trabajo, y algunos clubes cancelaron espectáculos programados. Las drag queens como Luka se ganan la vida principalmente actuando en clubes.
Durante décadas, las drag queens del país han actuado principalmente como comediantes, haciéndose pasar por cantantes y actrices y dando chiste en espectáculos de monólogos, a menudo a expensas del público.
Luka es parte de una nueva generación de drag queens que se posicionan como artistas y utilizan sus actuaciones para poner a prueba los límites de la libertad de expresión.
Pero el padre Jerome Secillano, portavoz de la Conferencia Episcopal de Filipinas, dijo a la BBC que una expresión de fe debe contener reverencia.
"Sé que Pura Luka Vega dijo que era arte... Lo que hicieron fue una burla a nuestra fe", dijo. "Consideramos que el acto en sí es ofensivo, ya sea que lo realice un hombre, una mujer o un miembro de la comunidad LGBTQ".
En respuesta a la reacción, Luka pidió disculpas a quienes se sintieron ofendidos por el acto de Jesús, pero defendió su derecho a expresar su fe.
"Lo que la gente no entiende es que Luka creció con un trasfondo religioso [y] todavía practica su fe a su manera", dijo Dulcinea Zulueta, quien trabaja con Luka. Luka no quiso hablar con la BBC.
Zulueta dice que ambos han recibido amenazas de muerte: "Me llamaron cómplice de un crimen sólo porque apoyaba a Luka. Recibimos mensajes de pastores diciéndonos que nos iríamos al infierno".
En el pasado, otros artistas filipinos han sido criticados por actuaciones o arte que algunos consideraron ofensivos para la fe cristiana. En 2011, el artista visual Mideo Cruz provocó la indignación de la iglesia católica por una instalación que incluía crucifijos y símbolos fálicos.
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